El vegetarianismo es una forma de alimentación, pero también un estilo
de vida que tiene en nuestra sociedad una importante presencia y cuya tendencia
está en ascenso. Está basado en el consumo de productos de origen vegetal, que
excluye, en mayor o menor medida, alimentos de origen animal.
Según la Asociación Americana de Dietistas (ADA), las dietas veganas,
lacto-vegetarianas y ovo-lacto-vegetarianas, bien planteadas, cubren las
necesidades del bebé, de la infancia y la adolescencia, promoviendo un
crecimiento normal. Además, las dietas vegetarianas durante este periodo pueden
ayudar a establecer patrones de alimentación saludable a lo largo de la vida y
pueden ofrecer algunas ventajas nutricionales, puesto que los seguidores de las
dietas vegetarianas ingieren menos colesterol, grasa saturada y grasa total, y
más frutas, verduras y fibra que aquellos que no siguen una dieta vegetariana.Tal y como dice la ADA, una dieta vegetariana puede ser perfectamente adecuada para un niño, siempre que esté bien planificada, como ocurre con cualquier otra dieta, claro. Las necesidades nutricionales de los niños vegetarianos son iguales que las de los niños omnívoros, sólo que se cubren con diferentes alimentos.